Pertenece a la línea investigativa: La recepción de las orientaciones de la Internacional Comunista en los Partidos de México, Brasil y Cuba. Una evaluación desde perspectivas identitarias. Dividida en tres proyectos, estos dos ya están terminados.

Presenta y valida una propuesta  teórico-metodológica  para el análisis de la participación digital en la cultura en su relación con las políticas culturales en el contexto contemporáneo cubano. Para alcanzar sus objetivos la investigación se sostiene en el método de la Teoría Fundada, que guió el estudio de caso único de una comunidad cubana de software libre mediante el uso de técnicas de investigación como la entrevista y el análisis de contenido apoyado en la minería de textos, entre otras.

El estudio resume los principales resultados de la II Encuesta Nacional de Consumo Cultural realizada en el 2008 con población adolescente en los segmentos de edades de 12 a 14 años y 15 a 18 años, en un segundo momento se reseñan los principales hallazgos de investigaciones mixtas y cualitativas con adolescentes y jóvenes realizadas durante el último quinquenio (2012--2017) que permiten una mirada más actualizada de estos temas, aun cuando no pueden ser mecánicamente comparados por tratarse de aproximaciones hechas sólo en la capital del país y en grupos poblacionales específicos, ofrecen información sobre tendencias que se mantienen y de otras realidades contextualizadas por la aparición de nuevos objetos de consumo al alcance de la población.

El proyecto presenta algunas de las ventajas de la Prospectiva y los requisitos necesarios que deberían cumplirse para su ejercicio en el campo cultural cubano.  El sistema de la cultura, al igual que otros sectores socio económicos de la isla, está inmerso en un proceso de cambios que se ha acelerado en los últimos años. La combinación de fuerzas internas y externas configuran un entorno altamente dinámico que necesariamente incorpora un nivel de incertidumbre acerca de los escenarios futuros.  La Prospectiva debería ser un elemento esencial de la planificación estratégica de las instituciones cubanas: permite establecer rutas críticas, además de jerarquizar variables, actores, objetivos, hipótesis, escenarios y cursos de acción, lo que se aviene al modelo de gestión planificada en condiciones de creciente incertidumbre y cambio permanente.